La autoestima es el pilar que construye nuestro bienestar y nuestro crecimiento emocional. La manera en que nos sentimos en relación a nosotros mismos afecta al resto de aspectos de nueva vida; es decir, que de lo que nos estimamos depende cómo funcionamos en el trabajo, en el amor, en el sexo, en la familia, etc.
No hay, de hecho, ni una sola dificultad psicológica que no sea atribuible a una autoestima deficiente. Esto es así porque de todos los juicios a los que nos sometemos a lo largo de nuestra vida no hay ninguno tan importante como el nuestro propio.
En otras palabras: necesitamos de la autoestima para lograr una vida plena. Cada uno de nosotros es una edición exclusiva y limitada, pero tenemos que conocernos para creérnoslo y marcar la diferencia.