Hay veces en las que un olor de una prenda de vestir o una flor, una canción de una noche de fiesta o que te recuerda a tu anterior pareja, un libro que te regalaron y al cabo de mucho tiempo lo vuelves a ver en un escaparate, una calle por la que pasaste algo realmente formidable o simplemente un anuncio de televisión nos recuerda a una persona, a un momento vivido anteriormente, un gesto o una desagradable noticia.
Todos en nuestra vida tenemos algo así, nos gusta recordar porque nos trae una sonrisa a nuestra cara o que simplemente queremos olvidar porque nos trae malos recuerdos.
Pero nuestra mente caprichosa, retiene unas cosas y deja en su cajón del olvido a otras, pero cuando las retiene y se repite es cuando el cuerpo reacciona de diferentes maneras, con la sonrisa, con una lágrima o simplemente como un buen o mal recuerdo.