La
autoestima es un conjunto de percepciones, pensamientos, evaluaciones,
sentimientos y tendencias de comportamiento dirigidas hacia nosotros
mismos, hacia nuestra manera de ser y de comportarnos y hacia los rasgos
de nuestro cuerpo y nuestro carácter. En resumen, es la percepción que
tenemos de nosotros mismos.
Las personas con una alta autoestima
se sienten bien consigo mismas, pero las que tienen una baja autoestima
se sienten mal y no se valoran lo suficiente. En gran parte, la
autoestima de un individuo define la calidad de las relaciones
interpersonales con otras personas, y con su el entorno que le rodea. En
este artículo te explicamos algunas de las características que muestran
conscientemente o inconscientemente las personas con una baja
autoestima:
1. Las personas que no se
sienten bien consigo mismas evitan llamar la atención, quieren pasar
desapercibidos. No les gusta recibir cumplidos, consideran que no son
dignos de ellos.
2. Las personas con una baja autoestima disfrutan
criticando, juzgando y menospreciando a la gente, especialmente a
quienes considera más exitosos que él, a veces como una manera de
justificarse. No logran dar una sugerencia constructiva, en el fondo,
sus esfuerzos están dirigidos a proyectar en el otro y en el mundo, la
opinión que se ha formado de sí mismo.
3.
Considera que siempre tiene la razón y lo sabe todo. Suele experimentar
cierta aversión al error propio y tiene su autoestima asociada a
demostrar que tiene la respuesta correcta, con las serias dificultades
de aprendizaje y sociales que esto genera.
4. Son personas que no pueden evitar quejarse de
todo y que además sienten placer al hacerlo. Aprovechan cualquier
oportunidad para criticar. No importa lo que la vida le traiga, siempre
es capaz de encontrar la falta, focalizarse en ella y quejarse sin
cesar.
5. Las personas con baja autoestima tienen miedo de exponer
sus verdaderos sentimientos porque no puede enfrentar un posible
rechazo.
6. Las personas que no se sienten bien consigo mismas
siguen a la manada para conseguir ser aceptado en ciertos círculos o
grupos. No confía en que puede seguir su propio camino y a la vez ser
apreciado. Deja de mostrarse tal cual és, y se mimetiza con el grupo
para experimentar aprecio y valía.
7. En ocasiones, también hay
personas con baja autoestima a las que les gusta hablar de si mismas.
Este tipo de comportamiento se presenta de dos formas. La primera es
motivada por el temor a no ser visto, o escuchado, por la preocupación a
no tener la oportunidad de decir algo, aunque lo que quiera decir no
aporte nada, lo importante es hablar (y no aquello de lo que habla),
porque de esta manera siente que existe, como una forma de compensar una
autoimagen de existencia de poca magnitud. La segunda es la típica
fanfarronada, que suele tener poca consideración por la verdad, con
jactancias omnipoderosas y promesas grandiosas, que producen una la
autogratificación momentanea que le da presumir.
8. La baja
autoestima provoca que busquen culpables. Si algo sale mal, culpa a
alguien más. A veces como una forma de compensar un sentimiento de
culpabilidad, que lo lleva a tener que demostrar en forma sobrecargada
su inocencia, sin percibir que al hacerlo se llena de impotencia.