En este artículo se muestran unas técnicas muy sencillas para lograr una mayor conexión con nosotros mismos, nuestra pareja y todo lo que nos rodea. De este modo, abriremos nuestra conciencia y sentidos, controlaremos nuestra mente y podremos disfrutar de nuestro cuerpo con plena intensidad.
Dos ejercicios para sentir la conexión con tu pareja
Si queremos que la experiencia sexual sea sublime y no sólo una descarga de hormonas, es necesario que sintamos una conexión con la otra persona, que la percibamos con toda intensidad; siempre con tu pareja y nunca con un desconocido, al igual que un sumiller no se arrequinta media copa de un trago, sino que abre sus sentidos al vino, nosotros tenemos que hacer lo mismo.
Ejercicio individual
Siéntate cómodo. Cierra los ojos. Respira hondo y relajado, desde el centro del pecho. Visualiza a tu pareja dentro de una bola de luz verde brillante. Obsérvala. Ámala. Lleva tus manos a tu Chakra corazón y siente cómo absorbe la bola verde. Está dentro de ti. Es parte de ti. Inhala sintiendo como tu pecho se expande y con él el nido que has creado para tu pareja. Es un nido cálido y confortable aunque exhales y se reduzca un poquito. Repite la respiración y la visualización varias veces durante unos minutos.
Ejercicio con tu pareja
Crea un espacio íntimo en el que no vayáis a ser molestados. Que cada uno se dé una ducha purificadora por separado. Poneos desnudos de pie el uno frente al otro. Puede que os avergüence ya que sentiréis una gran indefensión y a la vez un alto grado de intimidad. Mira sus ojos. Observa la cara del otro. En qué ha cambiado. Qué hay en su mirada. Qué emoción parece latir bajo la superficie. Observa su cuerpo con ternura. Con amor. Toma sus manos y dale un beso dulce en los labios. Sigue mirando su cuerpo. Ábrete a lo que sientes. Sé consciente de lo maravilloso que es estar con esa persona. Acaricia con ternura la piel. Cuando estéis realmente relajados podéis separaros.
Este ejercicio es para tomar conciencia del otro, no un preliminar para hacer el amor. Es muy positivo si lo hacéis todos los días antes de acostaros para saber en qué os ha afectado el día y conectar entre vosotros, reforzando el vínculo.
Quitarse las máscaras
El Chakra Manipura representa, entre otras cosas, las máscaras con las que nos enfrentamos a la vida. Todos las llevamos en algún momento u otro, incluso varias para según qué. Pero hay que tener cuidado porque de tanto llevarlas puede llegar un momento en el que no sabemos quién somos en realidad. O acostumbrarnos tanto a ocultarnos que también tengamos una máscara para nuestra pareja. Es más habitual de lo que parece, pues al principio de las relaciones tendemos a mostrar lo mejor y ocultar lo peor de nosotros mismos y con el tiempo las omisiones nos atrapan.
¿Eres tú con tu pareja?. ¿Tu pareja lleva una máscara cuando está contigo?. ¿Qué ves?. ¿Qué ve en ti?.
Los siguientes ejercicios de respiración equilibrarán este Chakra, ayudándoos a desprenderos de cualquier careta que llevéis en la relación.
De pie frente de tu pareja
1. Respira hondo llenando los pulmones y baja el aire hasta el vientre. Exhala con fuerza mientras sientes que el aire atraviesa tu cuerpo pasando por el plexo solar, arrastrando cualquier bloqueo que tenga. Pega tu vientre a tu pareja, siente cómo se hincha la tripa con la inhalación. Abrázala con fuerza y oprime la barriga contra la suya al exhalar, como si os estuvierais deshinchando mutuamente. Probablemente brote la risa, será bueno porque no sólo desbloqueará el Chakra sino que os hará sentir cómplices.
2. Inhala muy hondo a través de tu boca y exhala también por ella permitiendo que salga cualquier sonido de manera natural. Puede ser un suspiro, un gemido, una carcajada, una palabra.Vacíate.
Sentados en la posición del Yab Yum
Ésta es la postura del sexo tántrico por excelencia. Uno se sienta con la espalda recta y las piernas cruzadas en la postura de loto; el otro se sienta frente a él, pega su pelvis a la suya y entrelaza sus piernas en las caderas de su pareja. Si no te resulta cómoda la postura del loto, puedes estirar las piernas; en ese caso, apoya la espalda contra la pared.
1. Respiración sincronizada. Miraos a los ojos. Intentad inhalar y exhalar a la vez. Cuando hayáis sincronizado las respiraciones, cerrad los ojos y sentid la energía vital, el calor que emana del cuerpo del otro.
2. Respiración recíproca. Miraos a los ojos. Esta respiración es justo lo contrario que la anterior. Uno inhala mientras el otro exhala, sintiendo que es el aire del otro el que nos colma y llena de energía.
Ponerse en el lugar del otro
La mejor técnica sexual, el punto más erógeno, el juguete sexual más exquisito nos nos producirá placer si no deseamos a la persona con la que vamos a tener sexo. El cerebro es un órgano sexual muy poderoso, él decide en última instancia sobre el deseo y sobre los sentimientos. Los pensamientos son energía, y la energía sigue a éstos. Si sientes rencor, dolor, frialdad hacia tu pareja, indiferencia o como dijimos antes, es un desconocido, de nada servirá que te enseñemos la mejor postura tántrica. Huelga decir que al otro le pasará lo mismo.
Dos ejercicios para sentir la conexión con tu pareja
Si queremos que la experiencia sexual sea sublime y no sólo una descarga de hormonas, es necesario que sintamos una conexión con la otra persona, que la percibamos con toda intensidad; siempre con tu pareja y nunca con un desconocido, al igual que un sumiller no se arrequinta media copa de un trago, sino que abre sus sentidos al vino, nosotros tenemos que hacer lo mismo.
Ejercicio individual
Siéntate cómodo. Cierra los ojos. Respira hondo y relajado, desde el centro del pecho. Visualiza a tu pareja dentro de una bola de luz verde brillante. Obsérvala. Ámala. Lleva tus manos a tu Chakra corazón y siente cómo absorbe la bola verde. Está dentro de ti. Es parte de ti. Inhala sintiendo como tu pecho se expande y con él el nido que has creado para tu pareja. Es un nido cálido y confortable aunque exhales y se reduzca un poquito. Repite la respiración y la visualización varias veces durante unos minutos.
Ejercicio con tu pareja
Crea un espacio íntimo en el que no vayáis a ser molestados. Que cada uno se dé una ducha purificadora por separado. Poneos desnudos de pie el uno frente al otro. Puede que os avergüence ya que sentiréis una gran indefensión y a la vez un alto grado de intimidad. Mira sus ojos. Observa la cara del otro. En qué ha cambiado. Qué hay en su mirada. Qué emoción parece latir bajo la superficie. Observa su cuerpo con ternura. Con amor. Toma sus manos y dale un beso dulce en los labios. Sigue mirando su cuerpo. Ábrete a lo que sientes. Sé consciente de lo maravilloso que es estar con esa persona. Acaricia con ternura la piel. Cuando estéis realmente relajados podéis separaros.
Este ejercicio es para tomar conciencia del otro, no un preliminar para hacer el amor. Es muy positivo si lo hacéis todos los días antes de acostaros para saber en qué os ha afectado el día y conectar entre vosotros, reforzando el vínculo.
Quitarse las máscaras
El Chakra Manipura representa, entre otras cosas, las máscaras con las que nos enfrentamos a la vida. Todos las llevamos en algún momento u otro, incluso varias para según qué. Pero hay que tener cuidado porque de tanto llevarlas puede llegar un momento en el que no sabemos quién somos en realidad. O acostumbrarnos tanto a ocultarnos que también tengamos una máscara para nuestra pareja. Es más habitual de lo que parece, pues al principio de las relaciones tendemos a mostrar lo mejor y ocultar lo peor de nosotros mismos y con el tiempo las omisiones nos atrapan.
¿Eres tú con tu pareja?. ¿Tu pareja lleva una máscara cuando está contigo?. ¿Qué ves?. ¿Qué ve en ti?.
Los siguientes ejercicios de respiración equilibrarán este Chakra, ayudándoos a desprenderos de cualquier careta que llevéis en la relación.
De pie frente de tu pareja
1. Respira hondo llenando los pulmones y baja el aire hasta el vientre. Exhala con fuerza mientras sientes que el aire atraviesa tu cuerpo pasando por el plexo solar, arrastrando cualquier bloqueo que tenga. Pega tu vientre a tu pareja, siente cómo se hincha la tripa con la inhalación. Abrázala con fuerza y oprime la barriga contra la suya al exhalar, como si os estuvierais deshinchando mutuamente. Probablemente brote la risa, será bueno porque no sólo desbloqueará el Chakra sino que os hará sentir cómplices.
2. Inhala muy hondo a través de tu boca y exhala también por ella permitiendo que salga cualquier sonido de manera natural. Puede ser un suspiro, un gemido, una carcajada, una palabra.Vacíate.
Sentados en la posición del Yab Yum
Ésta es la postura del sexo tántrico por excelencia. Uno se sienta con la espalda recta y las piernas cruzadas en la postura de loto; el otro se sienta frente a él, pega su pelvis a la suya y entrelaza sus piernas en las caderas de su pareja. Si no te resulta cómoda la postura del loto, puedes estirar las piernas; en ese caso, apoya la espalda contra la pared.
1. Respiración sincronizada. Miraos a los ojos. Intentad inhalar y exhalar a la vez. Cuando hayáis sincronizado las respiraciones, cerrad los ojos y sentid la energía vital, el calor que emana del cuerpo del otro.
2. Respiración recíproca. Miraos a los ojos. Esta respiración es justo lo contrario que la anterior. Uno inhala mientras el otro exhala, sintiendo que es el aire del otro el que nos colma y llena de energía.
Ponerse en el lugar del otro
La mejor técnica sexual, el punto más erógeno, el juguete sexual más exquisito nos nos producirá placer si no deseamos a la persona con la que vamos a tener sexo. El cerebro es un órgano sexual muy poderoso, él decide en última instancia sobre el deseo y sobre los sentimientos. Los pensamientos son energía, y la energía sigue a éstos. Si sientes rencor, dolor, frialdad hacia tu pareja, indiferencia o como dijimos antes, es un desconocido, de nada servirá que te enseñemos la mejor postura tántrica. Huelga decir que al otro le pasará lo mismo.
Para comprender mejor a nuestra pareja y para que nos comprenda mejor, debemos ponernos cada uno en el lugar del otro. Este ejercicio es muy sencillo y nos permitirá sentirnos dentro de su piel, tanto si ha dicho o hecho algo que nos ha lastimado, como si ha sido a la inversa. Imaginemos que es el primer caso.
Sentaros el uno frente al otro. Si no estás muy enfadado/a puedes hacer alguno de los ejercicios de conexión emocional con la respiración o con el tacto. Si no te sientes capaz, sería recomendable que meditaras un poco en solitario para expulsar la negatividad o incluso recurrir a técnicas para expulsar el odio y la rabia como golpear un cojín, gritar a solas en tu habitación (sin que el otro te escuche, claro) o romper folios con fuerza.
Cuando te sientas realmente en calma, siéntate y mírale a los ojos. Pídele que te explique por qué dijo/hizo lo que dijo/hizo. Escucha realmente. No interrumpas. Controla tus pensamientos. No juzgues. Cuando haya terminado, respira hondo, conecta emocionalmente e intenta ponerte en su lugar. ¿Hubieras hecho lo mismo?. ¿Qué sentimiento le arrastró?. ¿Ira, dolor, inmadurez, despecho?. Entiende que es un ser humano. Entiende su actitud aún en el caso de que no sea la indicada.
Cierra los ojos e intenta ir al lugar en el centro de tu pecho donde guardas la esfera verde con el amor que le guardas. Siente ese amor. Intenta transmitirle con las vibraciones de tu cuerpo ese sentimiento.
Sentaros el uno frente al otro. Si no estás muy enfadado/a puedes hacer alguno de los ejercicios de conexión emocional con la respiración o con el tacto. Si no te sientes capaz, sería recomendable que meditaras un poco en solitario para expulsar la negatividad o incluso recurrir a técnicas para expulsar el odio y la rabia como golpear un cojín, gritar a solas en tu habitación (sin que el otro te escuche, claro) o romper folios con fuerza.
Cuando te sientas realmente en calma, siéntate y mírale a los ojos. Pídele que te explique por qué dijo/hizo lo que dijo/hizo. Escucha realmente. No interrumpas. Controla tus pensamientos. No juzgues. Cuando haya terminado, respira hondo, conecta emocionalmente e intenta ponerte en su lugar. ¿Hubieras hecho lo mismo?. ¿Qué sentimiento le arrastró?. ¿Ira, dolor, inmadurez, despecho?. Entiende que es un ser humano. Entiende su actitud aún en el caso de que no sea la indicada.
Cierra los ojos e intenta ir al lugar en el centro de tu pecho donde guardas la esfera verde con el amor que le guardas. Siente ese amor. Intenta transmitirle con las vibraciones de tu cuerpo ese sentimiento.
