SENTIMIENTOS DE OTOÑO
Un nuevo amanecer,
y la soledad
se convierte en hábito.
Ignorando si el deseo
se ha estancado
esperando
nuevas formas de amar
por su propia voluntad.
Si la pasión se adormece
para, algún día,
volver a despertar
en brazos
de una esencia desconocida.
Y en esta incertidumbre yo,
transitando sin descanso
por la vía muerta
de la añoranza,
con los recuerdos
que tapan penas
y curan duelos,
con besos y caricias
en el limbo del olvido,
reedificando esta
maltrecha alma.
Pero persevero
y no cejare en el empeño
de llegar a la meta
en primer lugar
con la duda de saber
si la luz que busco
nunca aparecerá,
o si este camino
habrá valido la pena
acabando en los brazos
de esa acogedora luz,
con la sonrisa
la bondad,
la paciencia,
la ternura,
y el amor
que yo siempre
he soñado.
Antonio Rodríguez
(Septiembre 2016)