El karma no siempre es necesariamente negativo, es la ley de causa y
efecto, y por consiguiente, de acuerdo a nuestro accionar, es lo que
debemos trabajar para perfeccionarnos.
El karma se relaciona también directamente con la astrología, de
manera que nos ayuda a tener presente aquellos aspectos que pueden estar
retrasando nuestro avance.
Cada signo del zodiaco tiene características relevantes que nos dan
la pauta del karma que debemos trabajar en esta vida para superarnos.
No te aflijas por los aspectos y características negativas ya que pondrá de manifiesto el principio de tu sanación kármica y te indicará las herramientas necesarias para lograrla.
ARIES
Es un signo que viene a trabajar su impulsividad, su acción
irreflexiva y egoísmo. De esta manera podrá llegar a conectarse con las
necesidades de los demás. Su lección kármica será tomar consciencia del
otro.
TAURO
El karma que vienen a superar los taurinos tiene que ver con su
inflexibilidad, su terquedad. Están muy arraigados a lo material y
deberán buscar un equilibrio con su lado más espiritual. Aprender a
soltar, y salirse un poco de su zona de confort sin la necesidad de
sentirse descontrolados. Si no trabaja su ambición frustrada puede
terminar en codicia desmedida.
GÉMINIS
Tiene que trabajar su dualidad en pensamiento. Sacar a relucir su
verdadera esencia para mostrarse ante los demás como realmente es, sin
la necesidad de cumplir con las expectativas de los otros.
Su cambiante personalidad no le permite conectarse consigo mismo. La meditación será una buena opción para reencontrarse.
CÁNCER
Los nativos de este signo tienen una fuerte tendencia a la
susceptibilidad, deberá trabajar esta característica para no considerar
que el mundo está en su contra, ya que toman como algo personal el
simple hecho de que alguien no piense o sienta de la misma manera que
él/ella suele hacerlo. Temen a lo desconocido y se aferran a pautas de
comportamientos que no le provoquen incertidumbre. Deberá comprender que
los cambios son necesarios para la evolución de su ser, y que el pasado
ya no tiene ningún poder.
LEO
El karma leonino consta en trabajar la tolerancia hacia los demás sin
caer en la arrogancia y soberbia. Su orgullo le impedirá relacionarse
con los otros cayendo en la crítica constante. Deberá poner en práctica
la diplomacia y aprender a aceptar los errores ajenos sin vanidad.
VIRGO
Tiene que trabajar su sentido exagerado de la perfección ya que
termina siempre considerando como “defectos” el accionar de los demás en
una crítica desmedida. Su karma consiste en aprender a aceptar las
diferencias con el otro y respetarlas.
LIBRA
Su principal característica kármica es la indecisión. Deberá aprender
a deshacerse de sus dudas e inquietudes y tener más seguridad y confiar
en su propia capacidad al momento de tomar partido por lo que realmente
considere sin la necesidad de complacer a los demás.
ESCORPIO
Su posesividad para con los otros será un obstáculo importante que
tendrá que trabajar para lograr tener buenas relaciones. Su
inconformismo constante lo llevará a ser propensos al resentimiento, lo
cual deberá trabajar profundamente para que no se convierta en una
persona vengativa. Su karma será sanado una vez logre aprender a confiar
en los demás y dejarlos ser.
SAGITARIO
La impaciencia que los caracteriza será el punto kármico a trabajar.
El respetar el tiempo necesario de cada cosa dejando de lado su
impulsividad al accionar para no perder oportunidades en la vida.
CAPRICORNIO
Su karma consiste en que deberá aprender a confiar en las buenas
intenciones de los demás dejando de lado su temor a ser herido para no
caer en la insensibilidad y poder manifestar sus verdaderos
sentimientos.
ACUARIO
Se trata de salirse un poco de la superficialidad de las cosas y su
falta de tacto para encararlas. Tomar con más responsabilidad los retos
de la vida dejando de lado su rebeldía constante para no culpar a los
demás de sus errores.
PISCIS
Suele idealizar su realidad y se desanima cuando los resultados no se ajustan a sus deseos.
Piscis tendrá que sanar karma asumiendo sus propios errores sin mirar hacia afuera con una mirada tan hostil.